sábado, 31 de marzo de 2007

El cachondeo del cambio de hora


Otra vez nos mandan cambiar la hora para ahorrar energía. Esto del ahorro energético ligado al horario se ha convertido en una leyenda urbana, en realidad nadie sabe decirnos exactamente cuanto ahorro ganamos con esta tontuna.

Que conste que yo no tengo nada en contra de que se atrasen los relojes, este Diplomado en Papiroflexia está solamente en CONTRA DE QUE ADELANTEN LA HORA.

Porque además siempre lo hacen en domingo, digo yo que no pasaría nada en adelantarla el lunes para que, por lo menos, empezaras la semana levantándote directamente a almorzar.


Esta gente te cambia la hora cuando le da la gana, aunque aquí cada uno cuenta la feria según le va. Imaginaos que te adelantan la hora cuando va ganando tu equipo, el Espinardo, contra el Bayern Munich o te la atrasan cuando estás corriendo un Maratón, especialmente en el momento en que han llegado a la meta doce mil corredores y sólo quedas tú, ¡joder! Qué cara se les pondría viéndote a ti en el podio con el record del mundo incluido.

Por otro lado con una hora más de luz diurna estamos tensando la convivencia social. Hay colectivos que aceptan a regañadientes este alargamiento del día solar. Estoy pensando en los trabajadores de los Centros de Día teniendo que aguantar a los ancianos una hora más de día, y en los albinos, la gracia que les debe de hacer gozar del sol una hora más, o por qué no el mundo de la prostitución, perdiendo ingresos por esperar una hora más a que se haga de noche para ir al curro.

Hay excepciones, sobre todo unas personas especiales a las que esto ni les va ni les viene: los políticos; ellos entran a trabajar a las 12, sea verano o invierno, y la luz se la trae al fresco. No es casualidad que sean precisamente ellos los que tienen este tipo de ideas absurdas, bendecidas, claro está, por la masa ecoidiota.

Nos advierten de que ésta es una medida que se produce en toda Europa, bueno, bueno, milongas. A mí que más me da que cambien la hora en Noruega, donde por cierto, tienen seis meses de noche, ¡ya me contaréis el ahorro! Podrían tener el detalle de adelantarles a ellos un mes…

En lo particular yo no ahorro nada, es más me cuesta el dinero. No ya porque pierda cuatro horas de mi jornada laboral en poner en hora todos los relojes, sino por los gastos que me ocasiona. Os relato algunos:

FACTURA TELEFÓNICA

-Papá, este domingo han cambiado la hora.
-¿Una hora más o una hora menos?
-Una hora menos.
-¿Qué hora es ahora?
-Las once.
-Pero ¿las once de antes o las once de ahora?
-Las once de ahora
-Bueno, entonces ¿cómo adelanto el reloj que te dieron con los recortes de códigos de barras de los cartones de leche?
-Dale al RESET y luego al SET…
-¿SET o no SET?
-De Shakespeare, ¡no te jode!...

Total 12 minutos y pico tarifados por segundos, que con el redondeo, establecimiento de llamada, contrato autónomos antes de las once, etc, te sablean como 26 minutos de cuando nos robaban y a llorar a la vía.

COSTES ENERGÉTICOS DEL DESAYUNO

Vamos a ver, yo antes me levantaba con la luz en los ojos. Como ahora tengo una hora de oscuridad tengo que encender algo de luz en la casa para ir a hacerme la leche; si además le sumamos que nunca acierto a la primera y enciendo, qué mala pata, la que le da en los ojos a mi esposa, que además grita como un despertador comprado en los chinos y hace que las niñas se despierten, no tengo más remedio que encender también las del pasillo para ir a la habitación de ellas a encenderles la lucecita para que se calmen. En resumen: 14 Kilovatios.

Un poco de respeto pido. Los que quieran aprovechar mejor la luz solar, pues que se levanten más temprano, pero que no flagelen al resto de los terrícolas.

Yo propongo una solución definitiva a tanto adelanto y atraso de hora.

¿POR QUÉ NO ADELANTAMOS LOS RELOJES SÓLO 30 MINUTOS Y LOS DEJAMOS YA ASÍ PARA SIEMPRE?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Sería un puntazo hacerlo así ¿porqué no se le habrá ocurrido a nadie antes que a ti? Yo de ti lo patentaba, pero ya. ;)

Meteorismo galáctico dijo...

Reconozco que yo tampoco entiendo el porqué de estos cambios. Leí por ahí que la idea de este último cambio (el adelanto de hora en primavera-verano) es la de evitar que haya nadie en la cama cuando ya hay luz (con el horario invernal, en estas fechas primaverales tendríamos el sol encendido a las siete o antes) ¡Si hay luz, hay que estar produciendo!

A mí me hacen un favor porque me encanta entrar a trabajar a las 7:30 y con todo oscuro, pero me temo que con eso yo no ahorro nada porque tengo que encender las luces en casa y, si aún no hay nadie en la oficina, también las encenderé para mí. Ahora que lo pienso, trabajo en un sótano sin ventanas, así que ahí no se puede ahorrar nada porque la luz tiene que estar encendida siempre que haya alguien trabajando. He seguido pensando y he recordado que en casi todos los lugares en los que he trabajado (y son muchos), las luces estaban permanentemente encendidas, así que allí tampoco se ahorraba absolutamente nada con estos cambios de horario.

Yo voto (soy extremadamente demócrata) por que dejen el horario de verano para siempre, así, por lo menos, al salir de trabajar en invierno, aún quedaría una horita para poder ir al Ahorramás viendo la luz del día, que tantas horas trabajando en un sótano no deben ser buenas.

Me gusta entrar a trabajar de noche, pero me encanta que aún sea de día cuando salgo, tal vez por eso no haya progresado laboralmente. Creo que a los “líderes” se les conoce porque nunca llegan antes de las doce y, supuestamente (yo nunca he estado allí para comprobarlo), se quedan en la oficina hasta muy tarde. ¿Hay alguien que pueda corroborar este punto?

Saludos a todos.

Anónimo dijo...

Y, ¿qué pasa con los que trabajamos de noche? ¡Trabajamos gratuitamente esa hora!