domingo, 3 de diciembre de 2006

Informática/Computing

La informática, como la religión, te soluciona el mismo número de problemas que te crea, hay que ver lo que se complica uno la existencia con el ordenador para tener una vida más fácil. Me preguntaba yo cómo había sido capaz de vivir tanto tiempo sin informática, mejor dicho, cómo había podido yo vivir hasta ahora sin mi amigo Eduardo, un pedazo de exégeta del código cibernético, un monstruo, el único capaz de repararle el ordenata a Bill Gates . Además de profesional es también un buen amigo, siempre empatiza contigo con las palabras justas, el otro día le llamé para que me solucionara una avería y él, dirigiéndose a mí con la ternura cómplice de quién reconoce en mí a un colega atormentado me respondió: “la próxima vez te metes las manos en tu puto culo”.

Que me vengan con monsergas pero yo era muy feliz antes de descargarme el Messenger, cuando tenía sueño me lavaba los dientes, meaba y me acostaba, ahora parece que me siento una mala persona si no me despido cada noche de mi lista de contactos mandando emotiñoños de dulces sueños a todo el mundo, incluso hay quien aprovecha la despedida para mandarme un archivo de una giga con alguna imbecilidad en PPS y tenerme esperando dos millones de minutos dando cabezadas en la mesa de camilla.

Con la informática ha aflorado la crisis de identidad que llevamos dentro, a veces pasa que tras un pomposo nombre, Sr. D. Diego de Almela y Burgo aparece la dirección de correo
almelitachuli@hotmail.com o tras rubitosexy75@hotmail.com se esconde un tal Francisco Javier Romanones, Comandante de la BRIPAC.

Los menús de ayuda son la repera, tu escribes: “dondeestalabarraespaciadora” y te devuelve: “separe las palabras de su pregunta”, o bien cuando sale el mensaje: “Su teclado no funciona, pulse una tecla para continuar” ,y si no cuando haces un diagnóstico del monitor y te aparece: “Compruebe que su pantalla está encendida

Bueno, termino este anárquico texto cuyo fin no era otro que hablarles de un buen colega; por cierto bastante feo, tenía para ustedes una foto de él pero se la comió mi antivirus, cosas de la informática.
COMPUTING
Computing, as religions, solves the same number of problems that it creates, honestly, what complicated is our existence trying to get an easier life with computers. I wondered how I had been able to live so much time without computing, rather, how I had could live until now without my friend Eduardo, such an guru of the cybernetic code exegesis, a true monster, the only one capable of repairing the Bill Gates´s smart box. Besides professional he is also a good friend, an empathetic person who always talk to you with the just correct words, last day I called him in order to repair me a breakdown and he, talking to me with certain tenderness of who recognizes in me a tormented colleague, answered:
" Next time put your fuck hands in your hole".
Stop going on at hassling me, I was very happy before downloading my Messenger, when I was sleepy used to brush my teeth, piss and go to bed, but now I feel as a bad person if every night I do not say goodbye to my list of contacts, sending sweet dreams drip-moticons to everybody, and it could happen somebody answered replying me back a stupid giga file in PPS (PowerPoint file) and made me wait for two million minutes nodding off on the keyboard.

Computing has showed our internal crisis of identity, sometimes it usually happens that behind a grave name, such as Sir Diego de Almela and Burgo appears his email address as hornyalmela@hotmail.com or nicesexy75@hotmail.com hides such a Francisco Javier Romanones, Spain Parachute Commander in Chief.

Help menus are usually the last straw, so you write: "whereisthespacebar" and PC answers: “unknown word, try to separate words and ask again", or when the message shows: " Your keyboard does not work, press a key to continue ", or why not, when you do a diagnosis of the monitor and you read: " Check that your screen is switched on "
Well, I end up this anarchic text which had not any other sense but to talk about a good colleague; certainly ugly enough, I had a pic of him to be shown you but it was destroyed by my antivirus, things of computing.

4 comentarios:

Meteorismo galáctico dijo...

Toda mi solidaridad para con tu amigo Eduardo. ¡Cómo me identifico con él! Si detallase en mi currículum todas las "intervenciones computacionales" gratuitas que he hecho a amigos, familiares, vecinos, amigos de mis amigos (básicamente a cualquiera), en mi vida, llenaría decenas de folios.

Es una pena que no sepa sacar provecho de una actividad tan demandada socialmente. ¿Tú pagarías a alguien por hacer lo que hace tu amigo Eduardo (en caso de que no pudieses recurrir a él, claro)?

Los informáticos y los médicos solemos ser un chollo, casi todo el mundo goza gratis de nuestros servicios. "Pepe, creo que tengo un virus en el ordenador ¿podrías echarle un vistazo?". "¡Ay Luisa! Cómo me duele el brazo ¿Qué puedo hacer para calmar este dolor?".

Como verás, he seguido la normativa de paridad en mis dos ejemplos para que nadie me llame machista o fascista (suelen identificarse ambas cosas).

Aquí dejo mi discurso. Saludos para todos y todas (llevo a rajatabla lo de la paridad. Creo que mi estupidez se está incrementando en exceso).

Meg dijo...

Algunos informáticos no se dejan pagar. Yo tengo un problema con mi ordenador y llamo a un amigo y cuando quiero pagar (porque no me gusta deberle nada a nadie), no me acepta el dinero. Eso sí, luego procuro invitarlo a cenar o, al menos, a unas cañas.

Meteorismo galáctico dijo...

Tienes razón, Meg, yo soy uno de esos que no aceptan el pago por sus servicios. Tal vez sea para luego hacerme el mártir, que es una afición que tenemos muchas personas.

De todos modos, yo diría que, aún cuando haya gente dispuesta a pagar, si cobrásemos lo que cobran en los establecimientos dedicados a estos menesteres, me temo que nos quedaríamos sin amigos.

Supongo que la gente no se da cuenta del valor de nuestras chapucillas porque, cuando vamos a hacerlas, no necesitamos más herramienta que unos cuantos CD's y una conexión a Internet. Tal vez si fuésemos pertrechados con un maletín lleno de artilugios extraños, nuestra labor luciría más y la gente no se asustaría de tan abultadas tarifas como cobran los que se ganan la vida con esto.

El Hermano Montgolfier dijo...

En este caso puedo hablar como profesional (no porque haya hecho un curso, como el 80 por ciento de los que se llaman informáticos), es impresionante el maltrato que sufrimos los informáticos, todo el mundo se cree que somos unos magos de cualquier aparato que se enchufe. "Oye, el movil no me funciona bien, ¿por qué no lo miras?", "Pero si no tengo ni idea de como funciona", "¿Pero tú no eres informático?". Bueno, y si no es la tele, el PDA con el GPS, o la madre que lo parió.

La gente se cree que un programador debe entender de todo lo relacionado con la informática, la electrónica e incluso de electricidad. ¿Se imaginan?, como dice Meteorismo, cuando vea a mi amigo médico, le pediré que visite a las gallinas, que las veo pachuchas, ¿no es médico?.

Por cierto, también le diré a mi amigo panadero que se lleve un par de barras a mi casa (por supuesto gratis).

No se trata de que cobremos o no, se trata de NO avisar a un amigo para asuntos de trabajo. Como informático reivindico que se nos llame para tomar café o una copita, pero sin ordenata por medio, y si se ha jodido el aparatejo, pues se llama a un técnico, igual que hago yo cuando se me jode la tele, y no se me ocurre mirar en mi agenda a ver si algún amigo especializado en cajas tontas.

Un saludo desde El globo de los hermanos Montgolfier