http://www.elmundo.es/elmundo/2007/08/10/espana/1186755180.html
El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, ha asegurado que el asentamiento de inmigrantes junto al trasvase Tajo-Segura en La Herrera (Albacete) "no es ilegal" y que están garantizadas "la salud y la seguridad en el entorno", aunque advirtió que vigilará sus contrataciones.
Además, precisó que son ciudadanos comunitarios y por tanto tienen plena libertad de movimientos y de establecimiento, por lo que aconsejó "enjuiciar la situación adecuadamente".
Gracias Caldera, ahora ya se puede acampar donde se quiera. ¡Cuánto hemos sufrido los de mi generación, sin poder poner la tienda en medio del monte, o en la playa! Obligados siempre a recoger la basura que tirábamos entre los árboles por culpa de aquellos gobiernos represores ¡se acabó! Qué tontos fuimos en meternos en una hipoteca sin saber que con cuatro duros podíamos comprar una tienda y empezar a vivir en medio de la naturaleza, sin tener que pagar contribución.
Que me oiga el viejo continente, VENGAN TODOS Y QUÉDENSE EN ESPAÑA, vini, vidi, vincit et acamparit, que en neolatín significa: venid, ved un sitio en donde acampar y quedaos aquí para siempre, argumentando por ejemplo, que estáis esperando para la campaña del ajo [sic], Caldera y los suyos no os desalojarán como vulgares chandaleros de barbacoita en el monte.
Aviso a los del botellón:
El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, ha asegurado que el asentamiento de inmigrantes junto al trasvase Tajo-Segura en La Herrera (Albacete) "no es ilegal" y que están garantizadas "la salud y la seguridad en el entorno", aunque advirtió que vigilará sus contrataciones.
Además, precisó que son ciudadanos comunitarios y por tanto tienen plena libertad de movimientos y de establecimiento, por lo que aconsejó "enjuiciar la situación adecuadamente".
Gracias Caldera, ahora ya se puede acampar donde se quiera. ¡Cuánto hemos sufrido los de mi generación, sin poder poner la tienda en medio del monte, o en la playa! Obligados siempre a recoger la basura que tirábamos entre los árboles por culpa de aquellos gobiernos represores ¡se acabó! Qué tontos fuimos en meternos en una hipoteca sin saber que con cuatro duros podíamos comprar una tienda y empezar a vivir en medio de la naturaleza, sin tener que pagar contribución.
Que me oiga el viejo continente, VENGAN TODOS Y QUÉDENSE EN ESPAÑA, vini, vidi, vincit et acamparit, que en neolatín significa: venid, ved un sitio en donde acampar y quedaos aquí para siempre, argumentando por ejemplo, que estáis esperando para la campaña del ajo [sic], Caldera y los suyos no os desalojarán como vulgares chandaleros de barbacoita en el monte.
Aviso a los del botellón:
Tontos, más que tontos ¿cómo se os ocurre beber de pie en la calle? ¡Se puede acampar muchachotes, lo dice Caldera! Poned vuestra tienda en medio de la calle, junto a los locales de moda, con vuestras neveritas dentro, la libertad de movimientos y establecimiento os protege.
Gracias Caldera, desde aquí te mando un besito.
(Por cierto: ¿en dónde quieres que pongamos tu estatua de tontorrón?)
Gracias Caldera, desde aquí te mando un besito.
(Por cierto: ¿en dónde quieres que pongamos tu estatua de tontorrón?)
4 comentarios:
Ya sabes, Ful, es esa eterna manía compulsiva de la clase "progre" de poner en práctica y aplaufir todo aquello que no dudarían en reprocharle a los demás, si hicieran lo mismo.
Uf hijico, cuánto protestar; acaso no ves que es bueno, que así el agua nos llegará con otro perfume, otro toque , distinta; y las lechugas ( si queda alguna ) estarán , con otra color y sabor, más...de otra manera vamos.
Saludos Ful, tiempo ha que no aparecías. Buen verano, que lo está siendo, no me negarás, con este tiempo tan loco. Hasta otra
¡Ay, Ful! ¡Pero que fascista eres!
El tema de la inmigración es complejo. Reconozco que yo no sabría qué hacer con esos grupos de inmigrantes que acampan donde les place y que dejan el entorno hecho un asco. Es cierto que, con un poco de colaboración por su parte, podrían acampar allí y llevar la basura al pueblo más cercano (a tirarla en los contenedores de basura) con sus “fregonetas” (tampoco parece mucho pedir). No sé si la ley permite expulsarles cuando, según dicen, tienen los papeles en regla. Es cierto que cuando nosotros acampamos en lugares prohibidos, nos echan sin más, pero también es cierto que nosotros tenemos casa a la que ir aunque, ahora que lo pienso, a lo mejor nuestros visitantes rumanos también tienten hogar en su Rumanía natal.
A quienes formamos parte del “sistema”, nos tienen ya completamente controlados. Tenemos nuestra casa (o nuestra hipoteca), nuestro trabajo (aunque no nos guste), nuestra familia, etc., y, para no poner en peligro todo eso, aceptamos cumplir con las normas que nos imponen. Pero esos que vienen de fuera, que no están integrados en absoluto en nuestro sistema, que no tienen nada que perder aquí, se pueden permitir el lujo de hacer lo que les venga en gana. Tal vez si este fuese un país como Libia, Marruecos, o alguna de esas naciones con regímenes “maravillosos”, los inmigrantes se cortarían un pelo a la hora de contravenir la normativa vigente, pero aquí lo más que les puede pasar es que les expulsen (con los gastos de viaje pagados), así que ¿para qué van a adaptarse al modo de vida que tenemos aquí? Cuanto más incordien más caso se les va a hacer, más van a salir en la tele y más ayuda acabarán teniendo. En fin, que lo más rentable para un inmigrante ilegal o que viene a la aventura (aunque sea legal), es escandalizar un poco a los locales para acabar siendo noticia de modo que el ministro de turno tome cartas en el asunto, cartas casi siempre favorables a ellos (quedaría feo de cara a la galería que Caldera expulsase a unos inmigrantes sólo por acampar donde no deben).
Dado que cuando volví de vacaciones me encontré la nevera estropeada (por segunda vez en dos meses) y ante la imposibilidad de que me la cambien en un tiempo razonable, me voy a ir a acampar al jardín de la Zarzuela.
Aviso al "Prínzipe" que iré por las mañanas a desayunar: tostadas con tomate, naranja y café con leche, por favor.
Así, además de servir para algo, conseguiré que el heredero al trono vaya practicando para cuando tenga que ganarse la vida como camarero. ZP elogió el otro día su labor; que se vaya preparando (o si no que tome nota de lo que le pasó a Segolene Royal, o a Schröeder, o al Barça...)
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